Queramos o no, siempre hay una última vez.
Siempre hay un momento en nuestra vida que nos toca decir esas palabras que tanto duelen, la despedida mas amarga que pueda existir.
Una palabra que hace mover los cimientos de todo tu ser.
Un portazo en la distancia que hace separarnos los unos de los otros.
Y es que cuando llega la verdadera despedida, nunca estamos preparados.
Vivimos ilusos creyendo que todo siempre estará bajo control y que las muestras de cariño y amor, pueden esperar.
Pero la vida es abrupta, sorprendentemente imprevisible y ahí, en ese instante, es cuando recordamos el por qué cerramos puertas a quienes ahora, tenemos que dejar marchar.
Y es que, qué difícil es tener que decir
Adios.
Toda despedida es un duelo que debemos y necesitamos realizar.
Ya que para poder sanar ese vacío, tenemos que comprender el por qué, aceptando la realidad de que lo que fue, nunca podrá volver a ser.
Te acompaño en tus procesos de duelo, para que puedas sanar ese vacío transformándolo en amor.
Jessica 💜
·El Lenguaje del Alma·
