Somos dioses encarnados en la materia.
Poseemos la magnitud del universo dispuesto a ser materializado en la Tierra. Olvidamos todas nuestras capacidades y potenciales al encarnar en un cuerpo humano y es que nuestra alma, es ancestral. No hay tiempo que esperar, nuestra diosa, nuestro dios interno, debe despertar para no volver nunca más a la oscuridad. Han pasado memorias imborrables que aún recorren las células de nuestro Ser. Sus partículas fueron contaminadas del peor de los programas, el Miedo. No des nunca más tu energía donde no se corresponde con tu vibración o tu evolución se verá mermada. Ahora mismo es el tiempo de limpiar todas nuestras células, de recoger todas las partículas perdidas en el espacio-tiempo y de encender el fuego interno para que surja nuestra parte divina. Somos poseedores de todo conocimiento que habita en el cosmos, pues somos un fractal de la misma creación. Haz temblar tus cimientos, tus creencias son puestas a juicio de tu libre albedrío para saber cuál es el siguiente nivel de vibración.
Eleva tu frecuencia para poder resonar en el amor. No dejes que el exterior te desestabilice, el poder se encuentra en tu interior. Confía siempre en tu intuición escucha tu cuerpo y actúa siguiendo tu corazón. El sendero de la vida te esta esperando, la transformación es latente en tu interior. No dejes apagar tu Luz y comienza a transitarte.
Agradece tus días, Abraza tus noches.
Jessica 💜
·El Lenguaje del Alma·
