Tenemos la creencia de construirnos personajes para sentirnos cómodos en el transitar de los días.
Pero realmente todos esos personajes tan sólo vienen de una herida no comprendida y rechazada por no aceptar el dolor de la realidad. Por ello el alma no entiende de víctimas ni de verdugos, si no que lo transforma en aprendizajes y maestros. Para experimentar la crítica necesitamos recordar a nuestro ego, observar cómo reacciona y calmar su descontrol con dedicación. Para poder experimentar la energía de la envidia abraza tu humildad, pues en ella emergen las carencias separadas de la unidad. Para experimentar el rechazo necesitamos maestros para recordarnos que no son ellos, si no nosotros mismos quienes abrimos esa herida desde el inconsciente anhelo del vacío. Para experimentar el dolor se reabre nuestra herida de niño, la que se aferraba a la no comprensión y revisando con amor que parte sigue sin sanar. Por ello todo depende de tu vibración y lo predispuesto que estés a aprender, pues la lección seguirá latiendo en tu interior hasta que te rindas a comprender todo aquello que te ocurre. La Tierra, la vida, no es tu enemigo, nada ni nadie te está haciendo los días insufribles, solo eres tú mismo negándote a amar. Cuando quieras cambia el papel en la dirección opuesta, deja el personaje de víctima y de verdugo y comienza a vivir desde el maestro y el aprendiz.
La tierra es la mayor escuela del universo y tú estás negando tu aprendizaje. Ámate cuando no puedas más, justo en ese instante te estarás rindiéndote a tu esencia.
No sobrevivas, Siente cómo vives a cada instante.
Jessica 💜
·El Lenguaje del Alma·