La vida tiene imprevistos que no vas a poder controlar. Cuanto antes aceptes la realidad, antes podrás volver a tu equilibrio.
Las cosas que suceden a nuestro alrededor dependen de muchos factores.
Nuestra vibración atraerá frecuencias en la misma sintonía, creando una alineación encadenada para que puedas observar qué haces y desde donde surgen las distorsiones.
Otras veces, puedes estar alineado en tu cometido, enfocado en todo cuanto quieres hacer y siempre habrá situaciones externas y ajenas a ti, pero que te afecten intrínsecamente sacándote de tu eje.
De una forma u otra, mantenernos en coherencia, requiere la maestría de la presencia.
Estar aquí y ahora, en el tránsito de la existencia no es sencillo, no es cómodo, y muchas veces, tampoco agradable.
Pero la resiliencia y el impulso deben ir de la mano, saber fluir con las adversidades, es la diferencia que marcará tu gradiente consciencial.
Si evolucionas y te transformas o por el contrario, te paralizas y estancas.
La decisión tan solo está en ti, en tu interior.
Así que la próxima vez que la vida se ponga patas arriba, sonríe a la distorsión, agradeciendo el próximo nivel de consciencia y ponte manos a la obra para sanar tu corazón.
No lo olvides, no te olvides

mayo 21, 2025
Hay días en los que el cuerpo pesa más, como si algo dentro estuviera removiéndose con fuerza. No es casualidad.